


Éste Hijo de Puta que Escribe



éste es el sitio en donde comparto mis hijo de putadaz. Relatos perspicaces y subidos de tono, humor no apto para el facebook. Reflexiones, Poemas y cuentos en donde hablo de gente que conozco cambiándoles el nombre.

LOS PORQUE SÍ DE UNA ( R ) EVOLUCIÓN ARTÍSCTICA
Este hijo de puta que escribe se siente sombrío. Escribe para sí mismo, como quien se limita a un puro acto de locomoción. Millones de músculos entran en juego, tendones y cartílagos que se fruncen y retuercen muñecas inquietas dispersando movimientos. Acto confuso de escribir pero ahí está... Ya no replantea el porqué, para qué. Ahí está y su aleteo es el mismo murmullo de un alma. Perderemos la escritura, y eso no lo consuela, como perderemos el habla y tantas cosas más, o ese sol que ilumina saldrá de su órbita y quedaremos reducidos a cenizas. De las bacterias otro hombre crecerá y así seguirá el mundo. Todo movimiento, acción y reacción, todo estimulo para algún impulso que desate la praxis de un sistema de respuestas, Que está hecho para que funcione en sí, en su panal que no es de todos, pero sin embargo es. Ya no discutiremos el ser, ya que es discutir el principio de un todo que ya no me aqueja, lejos de creerme en un todo me siento un individuo, y negaría hipócritamente mi orgullo ante ello. En tiempos en que estamos tan acostumbrados a vernos representados en un conjunto, tememos a lo desconocido. Hoy me paro frente Uds. como lo que soy: Este Hijo De Puta Que Escribe, eh aquí: Un Individuo.
Estamos acostumbrados a concebirnos en conjunto. Somos: Argentinos, Católicos, apostólicos y romanos (¿¿?) Somos blancos, americanos, judíos, gringos, militantes, oficialistas, troskos, sindicalistas, budistas, ateos, mormones, gnósticos. Hasta el hecho mismo de no tomar parte política o socialmente ya nos define. Nos da pavor vernos frente al mundo Y contra ello levantamos cualquier bandera que nos identifique con un grupo. Somos seres sociales o marginales, y en verdad nos olvidamos sencillamente como ser seres. Somos de la cultura o de la contra cultura, nos definimos en “tribus urbanas” idolatramos y reproducimos iconos que no conocemos, nos rotulamos de los modos más ridículos e inertes. Aprovechamos cada levantamiento de odio para sacar nuestra mierda. Ya no se ve una evolución en conjunto, quienes militan y aportan desde la acción a diversas causas aceptan que son la vía para un futuro, que ni siquiera son ellos mismo quienes realizaran la revolución (palabra que detesto desde su etimología hasta su tergiversación.) Y yo frente a ellos parado pensando, oyendo sus verdades y respetando, no puedo dejar de reírme en sus rostros, sin malicia, ni orgullo, ni siquiera con sarcasmo o vanidosamente, de lo errados que están al creer férreamente sus posturas de la militancia…
Entonces yo… Humilde ser, trabajador=alienado. Ciudadano respetuoso de todos los seres. Humilde ácrata en un tiempo erróneo, ser activo y manipulado, repudiarte de lo injusto, defensor de la inocencia. No puedo más que entender la militancia de otro modo. Admiro a quienes hacen de su vida un oficio: Admiro a los docentes y justos maestros. Aquellos que dejan parte de sus venas en pos de la enseñanza por aquellos que vienen. Porque de seguro ellos comprenden que es un engaño cuando nos dicen que nosotros somos el futuro. Ya que cuando menos somos este presente y lo que nos toca vivir. Y desgraciadamente somos apenas unos pocos los que de buena fe creemos que podemos dejar un aporte a los que vienen, porque en el campo de las ciencias, de las artes, de la cultura toda, y asuntos políticos y sociales podemos enseñarle a aquellos que vienen a dejar de poner la otra mejilla. A hacer una Revolución enserio si es que quieren hacerla realmente, porque eso es finalmente el don que la creación misma (llámele quienquiera como quiera que desee) ha dado al hombre, un potencial infinito lejano al dedo prensible.
Creo que particularmente, estamos (sin generalizar, entiendasé) muy cómodos en nuestra posición, exprimiendo hasta el hartazgo ideas de otros, copias de muertos, modelos políticos prehistóricos. En el ámbito del arte, y no quiero entrar en discusiones de lo que se considere o no como tal, somos pocos los que de buena fe creemos que podemos aportar algo. Estamos editando y re editando lo viejo, y lo que es aún peor, estamos quedándonos sin ideas, no hay ideas nuevas, no se piensa acorde a éste tiempo. Entonces yo propongo y confió en una revolución artística que apoye la libertad y que empiece desde cada uno, porque es ahí donde empieza cualquier (R)evolución. Yo hoy no intento convertir a nadie, ni hacer que nadie piense como yo. Me he cansado de discutir con todo el mundo. Hoy veo el mundo, la tecnología, en lo que se está convirtiendo mi cultura y trato de comprenderlo, a de aprender vivir con los demás de mi fauna en éste nuevo ecosistema y ya no intento despertar otro inconsciente que no sea el mío.
Tenía apenas dieciséis años cuando entendí la lección. Después de vivir la mayor parte de mi infancia en San Justo, Fui a parar a vivir a una provincia cuyana que no era sitio ni momento para mi; un anarquista adolecente que no consume marcas, que compra telas para hacerse su ropa, que no usa aerosoles ni fósforos, que no tira ni un papel en la calle, que no fuma ni contamina, que intenta comer poca carne, que sueña con la Revolución con mayúsculas, y quiere tener su feria de fanzines en la plaza del pueblo los fines de semana, y en verdad cree en la unión, en la decisión asamblearia , las marchas, la democracia directa. Yo venía a parar con mis atuendos y parches, con mis mechones de pelo, y los punkys de San Luis me querían matar, yo hablaba de paz, escuchaba Cadena Perpetua, creía en la unión. Yo miraba sus crestas y los sentía como hermanos. El acercarme a ellos solo generó repudio. Yo no podía convivir con ellos, sencillamente donde me veían se acercaban a amedrentarme, pedirme cigarrillos, o monedas o lo que fuera. Ellos querían escuchar dos minutos, flema, hacer pogo y jalar Poxirran. Y a mí me encantaba el pogo con dos minutos, pero yo quería hacer la revolución. Yo venía a hablarle de cosas a tipos que no querían entender que lo que ellos estaban haciendo no era contracultura, ellos hablaban del sistema y prendían fuego sus DNI y vagaban por el pueblo en verano ocupando casas abandonadas y haciendo malabares en los semáforos de a decenas, para todos lados iban juntos, o de a cinco, o seis. Siempre iban andrajosos y golpeados, incluso sangrando, o acomodándose un hombro salido. Siempre pedían una monedita pa’ la birra, y si no se la dabas eras careta, facho, no sos punk, puto y todo eso. Luego, en invierno, cuando la noche era cruenta y el viento irrespetuoso, no se veía una cresta por la ciudad, ya que estaban todos guarecidos en los barrios, dispersados, viviendo de babosas en las casa de sus padres, discutiendo todo el tiempo con ellos por sus viles vidas nihilistas.
Y yo, que reconozco que la contracultura con el socialismo no tendrían que haberse mezclado nunca, más allá de que suena irremediable que eso suceda seguro. Más claramente, el punk fue lo peor que le pudo pasar al anarquismo, ideología en extinción, palabra destrozada etimológicamente, despreciada culturalmente, mal enseñada, mal vista académicamente, mal aprendida por herencia. Porque para el común suena descabellada la idea de que todos los humanos nos pongamos de acuerdo, pero yo creo, yo creo en mi bella utopía.
Año dos mil y pico, anteúltimo año de la secundaria. Colegio de Bellas Artes, el lugar donde caía toda la escoria del pueblo, lo peor, lo que ya no tenía más albergue en ningún sitio, eso iba a parar al colegio de bellas Artes. Yo, un joven de acción, delegado de curso, encargado de prensa y difusión del centro de estudiantes, primer consejero del centro de estudiantes, último en renunciar al centro de estudiantes por la persecución de los profesores y las extorsiones. Futuro enemigo público de la escuela, los profesores, algunos directivos, y sobre todo preceptores. Declarado enemigo del centro de estudiantes manipulado por profesores retrógrados y degenerados, abandoné la idea de las ferias gracias a algunos colegas, unos muy buenos seres con los que aprendí infinidad. El blanco de mis fanzines fue aquella institución que estaba tan corrompida, que estaba tan desangrada, pero a mí no me importaba nada, no tenía límites, yo quería cambiarla.
Yo, un defensor de la educación pública, yo una pieza de molde más de un sistema educacional que se caía a pedazos. No todos eran zánganos conformistas, y a decir verdad el espíritu de lucha que logramos generar en la escuela fue altísimo, pero altísima tambien fue la censura y la amenaza. Muchos amigos también hice y me han llevado por el camino de la protesta; jóvenes artistas, malabaristas, músicos, o todo eso junto. Gente que nadie comprendía, ellos eran muy raros hasta para ellos mismos. Nos juntábamos a hacer fanzines y eran gente re sana, re tranquila, se fumaban su chalita si, y se escabiaban. Qué más se puede hacer en San Luis? Ellos no jodían a nadie. Vestían de negro y se auto flagelaban yo nunca los comprendí del todo, y hasta la fecha no estoy seguro de si ellos mismos lo hicieron. Escuchaban buena música y por sobre todas las cosas a mi me gustaban porque eran diferentes, porque la gente no los aceptaba, porque hablaban mal de ellos. Querían expulsarlos de la escuela. Todos tenían historias para contar sobre ellos, eran seres profundos que nadie comprendía, yo tampoco los comprendía, pero los admiraba de alguna manera.
Fueron tiempos de locura. Era tirar una piedrita y salir en el diario. Se me prestaba el doble de atención pidiéndome, que no lleve remeras abajo del uniforme, que no pinte las zapatillas, que mi campera no la podía traer, que mi pelo fucsia no podía ser, que parecía un maricón, que mis uñas no, que me ate el pelo por favor. Un día tuve la genial idea de pegar un cartel en una pared y hacer un panfleto en contra del uniforme azul Francia parodiándola con los pitufos y con la camiseta de Boca. Resultado, se convocó a una reunión de padres, El cartel decía: “ahora somos subversivos si queremos aprender, esa es la excusa. El saber te da poder” la directora de la escuela diciendo que habíamos tratado a ellos de subversivos…..¿??¡? Cosas así. Un traspié tras otros y mis fanzines seguían. Ya tenía varios colaboradores que aportaban a la causa, desde gente que editaba imágenes, hasta dibujantes, amigos que querían publicar algo con algún apodo anónimo, profesores que ayudaban a financiar las copias secretamente, y otros públicamente. Profesores que un día te adoraban y pasaban poemas de la che para tus fanzines que después te amenazaban con echarte y te invitaban a cagarte a piñas afuera del colegio. Profesores ciclotímicos como el Sr. Raúl Caviedez. Bien digo, un traspié tras otro. Hacíamos todo lo que molestara, no había acto de injusticia que no reclamáramos. La gente acudía a nosotros cuando tenían algún inconveniente, y desgraciadamente tenían otro trato para con mi curso. y digo desgraciadamente porque no lo merecían.
La persecución no ceso, ya algunos profesores nos advertían y nos decían, chicos, quédense tranquilos por un tiempo, no se manden ninguna. Era una cosa de especular. La directora venía a extorsionarnos para que la ayudemos a echar a un profesor que estaba acomodado desde arriba, y tiene en su contra algunas denuncias por acoso sexual, un tipo que daba una materia inútil y que había presentado él mismo una lista de alumnos para las elecciones para el centro de estudiantes. Un tipo despreciable, torpe para hablar, feo, con su pelo de esponja, y sus patillas canosas, con su horrible pelo saliendo de los oídos. Profesor sorete como el señor Oscar Rosales. Venía la secretaria a pedirnos que hablemos mal sobre la directora.
Dentro de toda esa nebulosa andábamos perdidos, yo y un gran amigo de la vida que se convirtió en la única figura de lealtad que podía acompañarme. El es fiel, el siempre estuvo conmigo en una época en que las peores eran mi vida, toda. Un tipo de fierro, por lo duro y lo flaco. Lo primero que me preguntó cuando me conoció fue una manera singular de suicidarse. Turbio el culiado, mi amigo El Mario. Nos juntábamos por las noches a vagar por la ciudad tomando vino o tocando la guitarra. Y hablábamos, hablábamos de esa manera que nadie soportaba hasta casi quedarnos dormidos en la oscuridad de algún callejón. Mario aprendió mucho al lado mío acerca del anarquismo. En las tardes en la plaza el cebaba mate y cuidaba el puesto de fanzines, aunque nunca, jamás, creyó una sola palabra del anarquismo. Pero su naturaleza es fiel, es oscuro, un ser oscuro como pocos de los que conozco, pero único en su genio y en su manera, pero que tiene demasiado poco amor propio.
Un día me replantee todo lo que estaba haciendo. Desde luego hay que plantearse ideas que uno pueda llevar a la praxis entendí. Pensé en abandonar todo al demonio. Ya estaba harto de discutir con todo el mundo. La marginalidad lo vuelvo a uno cada vez más marginal, cada vez menos aceptado. Si iba a abandonarlo todo lo iba a hacer a mi modo, iba a poner una bomba adentro de ese colegio, iba a hacer algo sin decírselo a nadie, como un suicidio, un kamikaze, voy a darles donde más les duele, voy a darles sin tocarnos. Voy a tocar su moral…
MUNDO AL REVÉS
Se llamó la primera y única edición de la producción independiente y auto gestionada más acotada de la historia. O al menos de esta historia.
En esa época no creíamos en hacer una revista en computadora e imprimirla. Nos parecía indigno, nos parecía muy correcto, muy moderno, Muy copyright. Usaba por aquellos momentos una vieja máquina de escribir eléctrica, una Olivetti que andaba con un cable licuadoras viejas. Pesaba más de treinta kilos, y a veces el tenerla mucho tiempo enchufada se saltaban los tapones. Nunca una máquina gastó tantos rollos de tinta como aquella Olivetti. Nuestras producciones por lo general eran hojas tamaño A4 donde lo que predomina es el collage, imágenes superpuestas, recortes de diarios y de revistas, letras de distinto color. Si poníamos alguna impresión de internet nos tomábamos el trabajo de recortar palabra por palabra y pegarlas separadas. El “do it yourself” era nuestro lema y así trabajábamos.
Creo que ya dije que no tuve colaboración alguna para mundo al revés. Y estaba bien que así fuera. Ya que en esa madrugada de liberación en que hice aquel fanzine tenía la idea de hacer algo que hable de mí, desde mí, desde lo que soy (desde lo que era) Aquello era una bomba que iba a aceptar como propia, y no quería hundir a nadie conmigo, tras ello. El enemigo común era otro. En las tapas de la revista, que ahora solo puedo recordar aunque alguna copia de seguro habrá por ahí; estaba el titulo escrito en letras al revés, y las animaciones y collages todos superpuestos. No recuerdo las fotografías, pero de seguro eran imágenes de represión policial mascaras de gas, arte pop y cosas del estilo, todo a color fotocopia. No? la contratapa era sobre un manto de hoja de biblia, eso lo recuerdo bien. Puse el Juan 21, cosa de la que nadie se percato, puse Juan 21 de la Biblia de Los Gedeones y nadie lo noto. Sobre ése fondo volaba Gokú en una nube voladora y algunas cosas más que no lo recuerdo. Me gustaba hacer las tapas una en negro y la otra en blanco por lo general, el efecto yin yang le decía, aquella vez no use ese recurso, porque la tapa era en gris, pera bastante oscuro. A veces era un riesgo de que la copia salga muy cara, y era cuestión de cuidar las monedas. En mayor parte las revistas eran financiadas por mis padres, era escasa o casi nula la retribución que obteníamos por aquello.
Al abrir aquella producción de pocas, pero concisas página uno se encontraba, sin demasiado preámbulo con un artículo sobre el socialismo Acrático de una manera totalmente aislada de la sub cultura. En la página de al lado, una reflexión sobre la contra cultura totalmente ajena al anarquismo. Más adelante, había algunos poemas a la manera de cadáveres exquisitos, Una sección de cocina vegana-(no sé si dije que Este Hijo de Puta es cocinero.)- Con algunas recetas demasiado sencillas. y así, artículos, todo muy ideológico, todo muy político entra imágenes de collages. Otra cosa que adoraba hacer era escribir oraciones o poesías completas del lado del revés, de manera que se lean frente a un espejo. Pero lo verdaderamente ruidoso de ésta publicación fue un artículo sobre masturbación femenina que cubría las dos páginas centrales, las vedettes de los fanzines, esas donde uno abrocha los ganchitos. Aquel artículo era el único que no había escrito yo, ese y una letra de una canción popular anarquista que estaba en la última carilla ates de la tapa. A modo de banda sonora, como cuando concluye un film, y te marchas de la sala escuchando el soundtrack, de manera que queda en tu subconsciente y después lo silbas o lo tarareas. No era el efecto que quería lograr, pero al menos… El artículo sobre masturbación femenina fue lo estruendoso del asunto. En el centro de la hoja justo en la unión de las páginas había una imagen enmarcada con un dibujo, claramente, de una señorita masturbándose, y no se veía el rostro de esta muchacha en cuestión, aunque uno de sus pechos que quedaba al descubierto del cabello enrulado. Me tomé el trabajo de buscar la imagen en internet, pero esta ya no es la web de aquellos años, y Éste Hijo de Puta que escribe mal, no es muy bueno con la tecnología, habrán ya notado. En cuanto al artículo; estaba recopilado de una enciclopedia de una sexóloga de la cual no tengo el privilegio de recordar su nombre, en la cual exponía una serie de tips para la correcta masturbación higiénica, cuidadosa y más placentera, naturalmente. Tiempo después al releer el artículo no lo creí menos terrible que lo que se escribe semanalmente en revistas que la gente compra en cantidades. Publicaciones como Cosmopolita, y cosas de estilo. O revistas en donde lo único que se venden son cuerpos y exageraciones de la sensualidad a un punto de indecencia. Para los profesores era pornográfico, era inapropiado para una institución como la escuela. Qué van a pensar los chicos de séptimo grado que no tienen porque saber lo que es un Cliptorís (sic)?- Me decían. y peor aún que van a pensar los padres?. Por lo que yo quería causar con aquella publicación mucho problema no me hice, aunque sabría igual a lo que me exponía. La difusión fue acotadisima, pero yo sabía adónde iba. Estaba harto de escuchar que la gente me dijera que mis revistas eran “lindas”, de ver a mis compañeras de curso coloreándolas para que queden más “lindas”, “más agradables” y yo quería todo lo contrario. Habrán sido diez copias que repartí en mano a los profesores y preceptores del establecimiento. Para asegurarme de que ninguno se quedara sin leerlo arrojé tres o cuatro copias por debajo de la puerta de la sala de profesores. No tenía la intención de ver una sola copia mal gastada, si veía que una copia estaba siendo usada en vano iba, la recuperaba y la arrojaba en algún lado donde hiciese ruido. No tardo en explotas la debacle. El resultado de aquello fue algo rotundo para lo que fue mi vida. Era desde ya suicida lo que había hecho, ya a estas alturas ni me salvaban los discursos de mis padres, y sobre todo de mi madre, que mil y un ves tuvo que ir a pelear por mis causas, a oír las peores cosas acerca de su hijo, y ahí iba, hecha una leona a defender con uñas y dientas. Mi padre también renegó lo suyo, solo que mi padre es menos bullicioso, mi padre es de esos que fruncen y se la guardan. Que se engullen su dolor a lo malevo. Que sufren en silencio la decepción y el fracaso. Hay que estar preparado para escuchar decir de un hijo de uno las cosas que mis padres han oído de mi, y no replantearse si habían hecho las cosas bien.
Algunos maestros que siempre nos habían apoyado habían perdido la confianza en nosotros. Ya desde la entrada de la escuela mientras se daba el buen día se hablaba de los que “tienen cabecita para hacer revistitas”. La persecución fue extrema. Tuve sin embargo aquel año una lucidez que no había tenido nunca para con mis estudios. Me esforcé en tener buenos calificaciones en todas las materias, hasta en aquellas que no significaban nada para mí y las daban tipos que me odiaban. Luchaba por el espíritu artístico de una escuela que manifestaba ser de bellas artes y brindaba muy pocas posibilidades para emprender el bachillerato. Todos dejaban los talleres de arte, ya que eran opcionales y condicional no excluyente para aprobar.
Exigiendo mi expulsión del establecimiento, una de las publicaciones fue adjuntada en una carpeta y enviada al “Ministerio de Educación de San Luis”, cosa que para aquel entonces era inexistente y era otro ente el que regulaba todo aquello relativo a la educación. Una farsa!! (Mientras se realizaban festivales de cine con figuras del espectáculo internacional). Pronto enviaron a una interventora a la escuela para ocuparse del asunto. Durante aquel periodo relacionarse conmigo era motivo para entrar en zona negra, muchos amigos comenzaron a alejarse de mi lado. Muchos, no todos, pero sobre todo Mario, él fue el único que se mantuvo aceptando su destino de guillotina. Pero el era distinto. El era colérico, fastidioso. Yo discutía, y estaba sumamente acostumbrado a ello, pero discutía con otra altura, con otra diplomacia. Es sumamente difícil estar hablando con gente adulta, con gente necia que no quiere comprender lo que le estás diciendo. Se requiere de auto control para no caer en la indignación, no desesperarse y terminar puteándolos. A Mario siempre le fallaba en ese aspecto. El era un tipo capaz de hacer llorar a una profesora, o hacer que otro docente le de clases solo a él. La diferencia entre él y yo era que si yo oía o veía algo hacía un cartel o pintaba una pared, en cambio Mario se levantaba y comenzaba a gritar denunciando, escandalosamente, totalmente contrario a su andar pausado y nervioso. Fueron tiempos en los que nos volvieron tedioso el acto de ir a la escuela. Todos los días bien temprano nos sacaban del curso para hablar con algún directivo, todos nos pedían algo. Que no digamos tal cosa o que si aquello, o que hablemos mal de alguno. Al terminar las clases todos los días íbamos a hablar con la interventora. La cabeza de esa mujer debe haber explotado, llamábamos a compañeros para que salieron como testigos nuestros sobre nuestros comportamientos y nos acusaban de formas grupos de apriete. (Una locura) Ya la intención de echarnos de la escuela no era algo que se ocultara, el más mínimo detalle era motivo de amonestaciones, y la provocación era constante. Se organizó una junta de profesores en la que se decidió mi situación y la respuesta más acorde impulsada por profesores inteligentísimos, excelentes personas llenas de amor como Gabriel Mainero, o Patricia Echanis, y porque no Pablo Melto, que siempre apoyo a su manera, aún sabiendo que mucho de lo que hacíamos era incorrecto. La decisión fue apelar a mi boletín de calificaciones. Ahí se evidenciaba claramente porque reprobaba lo que reprobaba y que en las otras asignaturas mis notas eran altas.
El silencio no es lo que mejor me sale, no tardé, naturalmente en morder su anzuelo. Amonestaciones necesarias para la expulsión veinticinco amonestaciones cajoneadas por la interventora treinta. Ya no quedaba ningún apoyo, los únicos profesores que uno lo quería se estaban jubilando, y a decir verdad nuestra posición era indefendible. Las discusiones con los profesores y preceptores eran constantes. No nos cabía ninguna. Todo lo discutimos.
Fue una mañana de esas negruzcas en que a uno ya no le importa nada que me dejé ver fumando un cigarrillo dentro de la escuela por un preceptor que me odiaba. Un tipo sucio y calculador que recorría los patios en busca de indicios para joder a los alumnos. No perdió oportunidad para hacerse un banquete de aquella situación. Fernández… me dijo con su enorme barba selvática- que a nosotros nos prohibían y hasta habían llegado a afeitar a tres personas con la misma prestobarba- y su sonrisa rechoncha. Su discurso era algo así;
¿Cómo usted?, que se queja de todo y nos trata a todos los demás como ignorantes. Conoce el reglamento. Eso equivale a por lo menos diez amonestaciones. ¿Escucha lo que le digo? apague el cigarrillo. Para cuando termino el recreo estábamos metidos seis o siete personas dentro de la dirección con el tipo (fumando), con una actitud totalmente desafiante hacia nosotros. Saben que los tengo que echar, nos decía a mí y a Mario señalándonos con el dedo. A Uds. dos los tengo que echar. Lo que el tipo nos propuso fue algo más o menos así. El no nos iba a poner esas amonestaciones, ni a nosotros ni a ninguno de nuestros compañeros (recuerdo seis o siete personas ahí adentro). Sabíamos que estábamos perdidos ninguna había hasta entonces malgastado ninguna palabra, pero aquello fue demasiado. Comencé yo:
Aceptando mi expulsión de la escuela y no aceptando sus condiciones. “Lo único que me voy aprendiendo de ésta escuela es a tranzar” recuerdo que dije, Para que quedarme en un lugar donde nadie me quiere. Ud. no me quiere acá dentro, voy a pactar con Uds. algo que no corresponde? por gente como Ud. la educación esta adonde esta. Ese con mayor o menos precisión fue mi discurso. Aquel tipo, un oportunista. Un vampiro con sus colmillos al acecho de lo mínimo le vio un camino que lo dejaba en la puerta. Entonces vos decís que tengo que amonestarte junto con todos tus compañeros, es eso lo que decís? a lo que nuestros compañeros se disgustaron con nosotros, pero seguimos firmes en nuestra postura, porque nuestra lucha era otra.
¿Para que vamos a quedarnos acá? -dijo Mario agregándole dramatismo a aquella desafortunada reunión. y cuando Facundo Giménez, que así se llama este gran hijo de la creación , dijere que él estaba en aquella escuela por amor al arte,Mario explotaría en una carcajada violenta, y de repente perdiera toda la compostura, y empezara a gritar y a tratar a este tipo de conformista, de actor fracasado, de no entender nada del arte, esas era n las cosas que a él verdaderamente le dolían, una vez había tenido que realizar dos veces el mismo trabajo para una materia de arte entregando dos veces el mismo dibujo de un tremendo sorete enroscado y con copitos con más o menor moscas y olor, Así era él. No pudo evitar sentir risa y rechazo por el discurso de aquel tipo estallando en una furia en la que el tipo lo hizo decir lo que él quiso, que nuestros compañeros eran unos mediocres. Que todos eran unos mediocres. Las celadoras y secretarias también preguntó aquel desgraciado a un Mario completamente perdido, Todos, todos repetía exaltado. Aquella fue nuestra guillotina.
Ya con el repudio de nuestros compañeros se hizo cuesta arriba el seguir asistiendo a clases. Jamás supe ni me importo quienes fueron los que persuadieron a todos mis compañeros del curso de venir a patotearnos a la salida de la escuela. La sacamos muy barata. Corrimos como nunca. Era todo nuestro curso, solo algunas personas trataron de ayudarnos que fueron las manos salvadoras que nos quitaron de aquel tumulto. Corran guacho! fue oír y al mirar atrás era todo, era mucho, eran demasiados corriendo detrás nuestro con motos y a pie. Luego de eso la situación empeoró. No hablábamos con nadie, no hacíamos nada. Ya recibía amenazas públicas, le decían a Mario; no es con vos, es con él. Lo vamos a agarrar lunes, martes, miércoles oía. Era tal el odio que les habían creado a los de nuestro grupo, a los que estaban en la misma que nosotros, a los verdaderos instrumentos de ese sistema de mierda, era tan grande el desprecio que le había fomentado que ante eso ya no podíamos hacer nada. Abandonamos la escuela a principios de diciembre del último año, para retomarlas en empresas de estudios a distancias. Nuestras vidas cambiaron, empezamos a trabajar, a querer viajar. Nos salimos de un sistema de desigualdad para meternos en otro mucho peor, mucho más real, mucho más despiadado, la vida misma.
En cuanto a nuestros compañeros más próximos, aquellos que no comprendieron que el enemigo era otro, a ellos les debo la enseñanza de toda esta historia que fue mi adolescencia. Sus golpes físicos poco me dolieron y no puedo quejarme de ellos. Fue el simbolismo de todo aquello lo que cambió mi mente. Más tarde sus remeras de promoción exhibirían con absurda perspicacia la leyenda “mediocres” y aquel seria su lema de representación, parafraseándonos a nosotros, a los inadaptados, a los que nosotros expulsamos (así decían orgullosos) Allí estaba el logro y a la vez el karma de Mario, en la aceptación de su mediocridad en pos del daño, en pos del regocijo en la desgracia del otro.
Sería necio de mi parte negar que haya perdido la confianza por la organización de los hombres. Tengo el indicio, porque ni siquiera es una certeza, de que debemos liberarnos y expandirnos mentalmente, artísticamente liberarnos hasta llegar al punto en que no exista opresión alguna, en que la voluntad humana este por encima de todo y a su vez nada pase por encima de nadie.
Esto no explica en sí los porque SÍ de una revolución por el arte, ni siquiera los porque NO. Pido disculpas por fallarle a usted que leyó todo esto tan mal escrito hasta aquí. Con todas sus imperfecciones, me tomo la atribución de compartirlo con todos aquellos que quieren algo mejor para el ser humano, algo más humano, aunque suene trillado. Pronto nos encontraremos todos juntos!
ÉSTE HIJO DE PUTA 8/4/15
POEMAS
Ni una frambuesa enferma
Que se posa sobre el sol
Reclamando unicornios y mariposas disecadas.
Ni la fosforescencia del turquesa añejo,
Alardeando su pureza,
Su señorial elegancia.
Ni luz blanca en inmundo universo,
Ni el tenue rojo de los inciensos.
Quizá el salmón de tus palmas sudadas,
Millares de líneas que se entrecruzan
Como caprichosos senderos que
Recorro y náufrago
Con mis ásperas yemas teñidas de gris.
Jamás verde pasto o fango azabache,
Tal vez esmeralda impávida,
Rechinante en tus pupilas,
O el morado néctar que drena
De la entraña de tus labios
Para fundirse en los míos
En un apagón añil de estrellas.
...Perfume de rosa…
Una ventana apenas comunica
Una ínfima porción del mundo
Con el todo real
La ultima postal de ese universo.
Un cuerpo pálido tendido sobre la cama revuelta
La lana impregnada de pecas,
De cabellos...
Zapatillas gastadas una vez más,
Tendones desgarrándose, incendiándose
En la caminata:
Parque Nuevo destruido
Las veredas entrechocándose, aplastándose con espasmódico
Recelo.
Llueve...
Y es preciso que todo se renueve...
Madre lluvia cura y lava
¡Tanta lluvia es necesaria!
Llueve y florecen los jacarandaes.
Perfuma de rosa
Una vertiente siniestra
Una lágrima ligera,
Es la imprecación de ceños fruncidos
Gemidos, risas y desvaríos.
La misma aspereza
La fatua rendición
La paloma ultrajada,
La bandera rotosa.
Mientras tanto dos bocas se conocen ebrias,
En sus alientos se pierden fermentando en rocío.
Más tarde se descubren en aura y saliva
Y va reinventando un camino en espiral
De adentro hacia afuera.
Ese que alguna vez le llamaban estima
Dos farolas incandescentes
Inigualables en fulgor,
Reflejo en espejo
Donde moran vanas pasiones.
Dos pechos tibios, rígidos
Con la facilidad de la saliva
Fría,
De alcohol fundido,
De ese musculo que acaricia como las yemas
De los dedos no pueden
Bastan segundos
Y estarán laxos, inertes.
Un cráter de luna,
Apenas un accidente.
Un ombligo por donde
El néctar se derrama
Hasta inundarlo todo
Perfuma de rosa
Y en el suelo dibuja
Las siluetas perdidas
En obtuso deseo.
Relato en verso de un amor hecho mierda.
ojepse ne ojelfeR Reflejo en espejo
roma us euF Fue su amor
orofsóf nu ed lúza mall aL La llama azúl de un fósforo
,nóritse omitlú us nE En su último estirón,
,otneiv le ne otirg omisíniF Finísimo grito en el viento,
,otneloiv y odrusba ogapmáleR Relámpago absurdo y violento,
.Otneimanicepme zotra noc odneibrosba ajnopsE Esponja absorbiendo con atroz empecinamiento.
ogeuf led sazinec noreuF Fueron cenizas del fuego
.secep noreuf, soinrocinu noreuF Fueron unicornios, fueron peces
.
res a noratimil es ,adan noreignif oN No fingieron nada, se limitaron a ser
Ella él. .lé alle Él ella. alle lé.
sonretla sodnum esded esodnéiv Viéndose desde mundos alternos
sadarom sebun ed soleic eD De cielos de nubes moradas senoirrog ednoD
senoirrog ednoD Donde gorriones
.senamsed sonitrebil sus nednerpmE Emprenden sus libertinos desmanes.
sorbil sol ne nárartnocne eS Se encontrarán en los libros
nárelod río la euq socsid ne Y Y en discos que al oír dolerán
adanergnagne adireh anu omoC Como una herida agangrenada
.razirtacic a esodnásuheR Rehusándose a cicatrizar.
,oícor yah on ay euq atsah Hasta que ya no hay rocío,
,saerf iN Ni fresas,
,soinrocinu iN Ni unicornios,
,ecay adabmurred ademaalad al Y Y la alameda derrumbada yace,
sorbmocse ed salio setnetopim sal omoC Como las impotentes pilas de escombros
noreuf oñatna euQ Que antaño fueron
.sacapo sallarum Murallas opacas.
oírbmos anrot es oleic ongam le aíd nU Un día el magno cielo se torna sombrío
adaem ragluv neleuh seadnaeacaj sol Y Y los jacarandaes huelen a vulgar meada
necerap sallertse sal Y Y las estrellas parecen
,selanigiro sal es saipocotof saieanidrO Ordinarias fotocopias de las originales,
,nagleucsed sadlanrig sal Y Y las guirnaldas descuelgan,
sacroha satsenuf omoC sáM Más como funestas ahorcas
,sonroda secilefni omoc euQ Que como infelices adornos,
áres on euf euq ol euqrop Porque lo que fue no será
.ecelaverp on se euq ol Y Y lo que es no prevalece.
amla le orrafsed sel euqroP Porque les desgarro el alma
,sojo saes ne rev Ver en esos ojos,
soduconoc nare sel ueq Que les eran conocidos
amla amisimsim us omoc Como su mismísima alma
aritnem la ed ojopsed lE El despojo de la mentira
.omsacras ed sojed Y Y dejos de sarcasmo.
,secnotnE Entonces,
otro le ne esracsub a sodarbmutsocA Acostumbrados a buscarse en el otro
,sodajelfer esrev araP Para verse reflejados,
,auga le ne osicraN omoC Como Narciso en el agua,
narartnocne es oN No se encontraran
,oirdiv ed sojepse sol nE En los espejos de vidrio,
,anoiciart sol larsirc le is Y Y si el cristal los traiciona,
,esrev nif la narargoL Lograran al fin verse,
,elbirret sonem áres oN No será menos terrible,
,soicav nárev es, soef nárev eS Se verán feos, se verán vacios,
soteiuqni setne náreS Serán entes inquietos
,arbmunep la ne odnadaN Nadando en la penumbra,
...samall sal ne esodnéimusnoC Consumiéndose en las llamas…
....otneL Lento…
.ísa erpmeis Siempre así.
rotnac ollag le euq astaH Hasta que el gallo cantor
,oñeus le apmorroc seL Les corrompa el sueño,
dadilaer al a avleuv soL y y Los vuelva a la realidad
,sebun sarto noC Con otras nubes,
,sajnaran sebuN Nubes naranjas,
. esracsub on ed asemorp la y sajnaran sebuN Nubes naranjas y la promesa de no buscarse.
(Homanaje a Cátulo)
De la prosa a la rima como a mí se me cante,
como aquel buen Comandante
procederé a contar,
y como quien cuenta canta..
que a mi tus cantos me encantan,
y me incitan a tocar
redobla el redoblante..
y citará la cítara
y el bien hablado poeta de esta forma recitará:
"canten buenos cantores..
Canten prestos, los exhorto,
no vaya a llegar Cántaro,
y les haga cantar el orto..."
Que el cantar de los cantares,
a la fecha bien sabido,
no canto, bella, aquello
que por previsor no cuento.
Pues el cantar se propaga...
se expande cual pandemia,
se impregna en el espeso aire,
y de algún sitio se aferra,
de igual manera mis manos,
llenas de vicios, inquietas
quisieran mi vida un día tomar ese para de tetas
y con mesura, dulzura..
Te haré probar la ganzúa
Porque cantando yo encanto
y a mí me encanta encantar,
una vez que ya no cante
entreguen mis cantos al mar.
De pasiones Derramadas
Orden y silencio
Comienza el exorcismo.
Mostrar reverencias, poner atención,
Póngase cómodo
Comenzó la función.
Es aquí, ahora lugar y momento.
Escupa con fuerza,
Vomite sin asco.
Las arcadas ásperas,
Las flemas calientes, el moco,
las lagrimas bienvenidos son.
No sea modesto, míreme a los ojos,
Gríteme su bronca, salíveme la cara,
Golpéeme si le place, hágase su voluntad.
Cante y baile al compas de campanas,
De alcohol y de fuego, de bombilla y mate,
De bidet y sarro,
De impregnadas cortinas…
De cera de vela, de hilo y aguja…
De Gillettes que hieren y curan,
De mentira que da vida,
De miradas que engañan,
De pasiones derramas,
Quimeras débiles cicatrices y golpes
[De rutinas y abusos]
De albóndigas y granadas,
Dios, Estrella, Sexo, Lava, Carne, Arena,
Tierra y Agua.
Cantemos ahora que suenen guitarras, violines negruzcos,
Panderetas finas,
Y algún desgraciado cantando sin asco,
Danzando con el Alma,
¡Que termine en fiesta de hostias y excesos!
Diáconos y curas disfruten hoy de éxtasis y de besos ,
Derramemos las copas, quememos las plumas,
Y en ritual pagano de karma y lujuria
Apelemos incrédulos a un despertar nuevo,
De nubes y soles, de pan y trabajo, de geranios finos,
Y hebras de té,
De vapor de ollas, de empanadas calientes,
La radio, las miradas,
De dormir la siesta, de fósforos y guirnaldas.
Donde lava y barro no sirven de nada,
Hay calor y sonrisas esperando ansiosas…
¡Andáte te digo, se acabo la joda!
Orión nos espera, arribemos ahora.
Teseo honesto
Pocas cosas pueden parecer relevantes en la cotidianidad diurna de La Ciudad
Sus calles, bocinazos que irrumpen el fluir del viento,
Aviones a chorro, lejos, allá, arriba, surcando el cielo.
Ariadna podría abordar cualquiera de ellos y tal vez no.
Un camión se detiene a metros suyo.
Comienzan a bajar medias reces al hombro.
Pocas cosas… y
Sin embargo era mejor sentado en el café o caminando por Trejo,
Aunque pensara en aquellas cosas que dijo y no daba decir.
Nimio el pasado pensó.
Intentando empañar el proverbio de “todo tiempo…”
Trivial todo aquello que no prevalece. Reinventó en su cabeza el axioma,
Tiempo…
Afuera todo se sentía mejor aquella mañana,
Incluso el calor, incluso el apagado recuerdo de Ariadna desvaneciéndose.
No, no era que la ciudad resultara menos interesante.
Aquella postal del alba
De densas nubes grises sobre el sol encendido
Resultaba, imponente como cualquier paisaje.
A esa hora en que suenan timbres a lo lejos
y el vapor del agua para el café comenzó su ebullición;
Intuía que a media mañana el calor sería agobiante.
Por ahora fumaba, no daba hacerlo, pero fumaba el cigarrillo de la ayuna,
Más tarde tomaría un café que ni daba beber
y luego tendría que irse a encerrar en un departamento desordenado, caluroso y mal iluminado.
Y aquello, tampoco daba demasiado.
Y lo que había escrito;
Ojos zafiro,
Sutil caoba
y sobre todo; “dentadura ámbar”.
Ya ni daba terminar esa historia escéptico de poder olvidarla inmortalizándola en un cuento.
Se idolatraba más bien poco,
Más allá del ataque de los ex compañeros de La Academia de Letras
De cursi,
Ecléctico,
Repetitivo.
Sólo un vivo impulso lo alentaba.
¡Bienaventurado el melodrama del olvido!
Santo remedio, aunque ya no sanara.
No existe droga, pensó.
Y ni daba…
pero tampoco había herida que curar,
Ajena su alma a las cicatrices de sus manos.
Hay gente que analiza patologías incurables,
Aunque por sí solo “el análisis” no sea lo suyo
Esto es re curable. Casi se oyó diciendo
No quería ser injusto con su naturaleza autónoma.
Su gen shusticiero lo dejaba una vez más en un cashejón cerrado.
“Defensor de pobres e inocentes”
Dice el distintivo en lo alto de su pecho.
Y más cerca,
En lo bajo de su frente,
En la punta de sus pies,
Estaba Ariadna de nuevo,
Alejándose de nuevo.
Pero de otra manera.
Desde la lejanía abismal del tiempo y ya no la distancia.
Solo hasta que Él concuerde obstinado en dejar de engañarse:
Esa no es la postal que hubiera querido,
y aquello no era ni siquiera un desayuno
y la ciudad siempre era la misma,
Igual que ella que así era y así sería;
Inquieta Ariadna torbellino y remanso
Que sacude estanterías.
Opulenta Catelyn Stark,
Impulsiva viajera,
profusa visitante, ola caprichosa que entra y que sale,
Que viene y se vá.
Federal Payk,
Las Polleras,
Polísfloris
Salir entrar, subir, bajar
Acercándose con la paz de un felino arisco,
Huyendo de nuevo como solo las fieras pueden perderse en los pastizales.
La histeria era el ungüento con que suavizaba sus pómulos,
Su rostro cortado.
Ya su coartada perdía el nexo.
Infame, todólogo Teseo, el paciente.
El que se queda, el pséudo Traveler
Creía con descreimiento que tanto salir y entrar del laberinto,
Si ella llegara alguna vez para quedarse en su vida,
Ese instante sería eterno.
Pero, naturalmente, era muy temprano aún y no daba pensar en eso.



Entonces era el efecto cenicienta repetido,
y para encontrar a María, debía buscar en todas las Marías.
Saciedad vikinga a un hambre de ayuno.
Una devoción umbilical.
Veíase en la cima del mundo
Una inmensidad jamás contemplada.
Prestos los rollos de memoria a grabar todas las postales
fotografiadas en su alma. Era una suerte de cornisa, era el sotabanco del Universo.
Girones de verde reverberan en un magno manto pintado al oleo, telón del cielo.
La madre vida en todos sus estados, expresándose en todo lo que somos,
En el oxigeno que inhalamos, en el curso inmutable de la sangre por nuestras venas.
Denso el aíre de su Edén.
Estaban allí:
Donde el cielo y el suelo que pisan es toda una sola nube
Que el viento arrastra mezquinamente,
Lentamente cual discreto susurro.
Estaba la Begonia Harpía,
El Marsupial agazapado,
La brugmancia Arbórea seductora
El aguilucha amurcielagada,
La Esfinge sin rostro.
Una embestida rallante
Entromete halos de luz
por las rendijas de la esponjosidad celestial.
Y sin embargo, nada es más precioso que su rostro anguloso.
Sus lentes se empañan.
Sudorosos sus marcos dorados,
No sobresaltan de su cabello cobrizo
Largo hasta la baja espalda.
Enfrente suyo
Vanos eran años de civilización...
Los pómulos rosados entrañables.
Una nariz imperfecta, como todas las de mi tribu.
Misterios eternos de la especia Hombre
Jamás desentrañados.
Ojos miel, Ojos malta.
Flores y frutas de la colonización.
Derramada sangre de las dinastías.
Pasados por la espada, despojos de la inquisición,
Del crucifijo.
El cinturón de Orión alineado a su cintura.
Pálida su espalda de arco perfecto,
Las líneas de Nazca habíanle allí pintado una rosa.
Natural ungüento veraniego de la Pacha Mama
Bronceó sus brazos Largos, de hombros pronunciados.
Vuelan por las colinas Hadas envueltas en Esferas de Klerksdorp
Adivina en el fondo, del otro lado la Atlántida, allá en sur
y... qué importa…?
si es perfecto el corte del triangulo de sus bermudas.
Debajo, calzas negras abrigarían sus piernas Torneadas,
Sus muslos tallados,
Las pantorrillas prominentes típicas de los pelirrojos.
Qué importa?
si su pelo no era rojo aunque si su boca.
sobre todo esta su Boca
Roja y carnosa como un corazón,
Como una metáfora de la hermosura.
Toda la galaxia girando,
Todo estimulo para una respuesta
Todo conforme a un sistema de átomos y moléculas,
Partículas mutando y reclamando vida.
Ahora miraba los murallones
Tan estrictamente alineados.
Piedras de desiguales formas
Apiladas una sobre otras,
Sin resquicio ni grieta, ni imperfección alguna entre ellas.
La métrica a pedir del hombre.
Ahí el Alma Agua, el Astro viento,
la Madre Tierra, el Rey Sol (...)
Agujeros interespaciales...
Todo vano
Ante una sencilla mueca,
Un esbozo en las comisuras de sus labios.
La naturaleza toda, toda la historia del hombre
Tras su sonrisa, o su manera de fruncir las cejas.
Virgen de los Deseos, María. María, Madre Milagros.
Princesa María Guadalupe. María, la del zapato Perdido.